PROLOGO

El presente libro, recoge los primeros 100 articulos que los padres Crisóstomo Geraets, O.P. y DanielRoach, O.P., escribieron como una orientación a la luz de la Fe acerca de losproblemas que se suscitaban en nuestra sociedad y en la iglesia misma.

Estos artículos fueron publicados en la Revista Reflejos de la Semana, en el periódico El Deber, y por el canal 4, Galavisión.

Si bien, la experiencia clé un Nuevo Pentecostés que se ha venido viviendo en nuestro Centro La Mansión, y se lo vive actualmente 21 años después, han producido con versiones auténticas en miles de hombres y mujeres que nuevamente volvieron a la Iglesia para emprender los caminos del Señor Jesús, ello no ha constituido ningún cuidado para que desde este lugar, se hiciera un llamado a la conciencia social respecto de nuestros agudos problemas que en mucbos caves han involucrado a sectores con capacidad de poder y decisión para el bien o el mal de nuestro país.

La misión de la Iglesia es profética y salvífica, en ello los padres Cris y Daniel han sabido con du cir este cen tro de espiritualidad, con ocido como La Mansión, con un acierto que no deja duda que el mejor camino para alcanzar los cambios que queremos y necesitamos, sólo es posible a partir de un encuentro real con Cristo Resucitadoy comprometido por la acción del Espíritu Santo a construir una sociedad más justa y fraterna.

Estos primeros 100 articulos, nos presentan una variedad de temas que a pesarde mostrarnos parte de la realidad boliviana, sin embargo no se circunscriben a este área geográfica, sino que nos muestra también una imágen sufriente de la realidad latinoamericana.

La publicación de este primer libro, constituye un testimonio para todos quienes quieran ver que la voz de la Iglesia no es ni debe ser indiferente a los problemas concretos que afectan a los hombres y a las mujeres de nuestro tiempo, y por los cuales tenemos que trabajar comprometidos con la causa de Cristo hacia la transformación de este mundo por la acción del Espíritu Santo, desde un Nùevo Pentecostés.

P. Róger Terceros, O.P.